CCOO de Catalunya presenta alegaciones en el Plan de Movilidad Urbana de Barcelona ante la falta de impulso de la movilidad sostenible y segura

El plan apenas contempla los polígonos industriales

Recientemente, la Comisión de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona aprobó de forma inicial, el Plan de Movilidad Urbana (PMU) 2013-2018. Este proyecto puede determinar, en gran parte, el modelo de ciudad para los próximos años, ya que intentará modificar los desplazamientos por Barcelona y los impactos sobre la calidad de vida a millones de personas. Todo esto tiene evidentes relaciones con la siniestralidad, la contaminación atmosférica, la actividad económica, el coste de viajar, la accesibilidad, la discriminación de personas, etc.   

 

El PMU partió de un irregular y complejo proceso de participación y estas semanas de verano se encuentra en exposición pública. Una vez analizadas las aportaciones de ciudadanos y entidades, el plan deberá debatirse en el Pleno Municipal, donde podría aprobarse definitivamente. 

 

Desde CCOO de Catalunya una vez más criticamos el desarrollo de procesos de exposición pública justamente en período estival, lo que merma la capacidad de participación democrática de la ciudadanía. Sin embargo, finalmente el Ayuntamiento ha prolongado el plazo (que debía finalizar el pasado día 20) hasta el 5 de septiembre, una pequeña compensación. 

 

En una primera lectura del contenido del PMU, éste presenta ciertas contradicciones. Por ejemplo, se plantea una reducción de los accidentes de tráfico, en línea con los objetivos de la Unión Europea (30%), a partir de una modesta reducción del uso del vehículo privado. Pero, en cambio, se prevé un incremento de la movilidad en motocicleta, cuando ésta ha significado el 75% de los heridos graves según el informe sobre accidentalidad de 2013. Pero este porcentaje llega hasta el 86% si añadimos a las personas heridas para conducir ciclomotores . Así, a juicio de CCOO, difícilmente podrá lograrse una sensible reducción de la siniestralidad en las calles barcelonesas. 

 

Para este sindicato resulta especialmente preocupante el tratamiento que reciben los polígonos industriales y las zonas de actividad productiva. El propio PMU reconoce que más de la mitad de los accidentes de circulación están relacionados con los desplazamientos por razón de trabajo. Pero de forma contradictoria apenas se establecen medidas para corregir la situación.  

 

Un caso paradigmático es el polígono más importante de Barcelona y uno de los principales del sur de Europa: Zona Franca. Aquí el plan establece, con esperanza, la llegada de la línea 9 del metro. Pero una vez más se desdice al reconocer que ésta no llegará antes del año 2020. Hay que recordar que el PMU tendrá vigencia hasta el 2018. ¿Qué tendrán que hacer los trabajadores y trabajadoras de esta zona, obligados ahora a tomar el coche particular ¿en un 70% de los casos?   

 

Hace unos días el Área Metropolitana de Barcelona anunció una buena noticia: los servicios de transporte público están ganando pasajeros (un 1'1% en el primer semestre de este año). Sin embargo, una línea de autobús ha reducido más de un 30% el volumen de usuarios. El motivo de esta reducción estriba en que el autobús ya no llega a Mercabarna desde hace unos meses, porque esta entidad ha decidido no contribuir a los gastos que comportaba. En cambio, se está construyendo un nuevo aparcamiento de vehículos privados en sus instalaciones, con un coste mucho mayor. Lo paradigmático es que Mercabarna está participada en un 50% por el Ayuntamiento de Barcelona y en un 12% por el Consejo Comarcal del Barcelonés. ¿Es ésta la apuesta por una movilidad más sostenible y segura de una ciudad que se considera avanzada?  Ahora decenas de trabajadores y trabajadoras han quedado sin servicio de transporte público en la propia Zona Franca. 

 

Desde CCOO de Catalunya esperamos que las aportaciones que presentaremos diferentes entidades durante el período de exposición pública del PMU sean atendidas y permitan reorientar sus contenidos y contribuir a una decidida mejora de la calidad de vida de Barcelona y su entorno.