Nueva congelación de las tarifas para 2017
Esta semana se anunció un acuerdo entre las administraciones que forman parte de la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) de Barcelona en relación a la política tarifaria del transporte público. Por tercera vez consecutiva no habrá incremento de precios en este ámbito territorial.
Desde CCOO valoramos positivamente esta congelación del coste de los títulos de transporte que han consensuado la Generalitat, el Ajuntament de Barcelona y el Área Metropolitana de Barcelona. De esta forma se consolida la ruptura con la tendencia practicada por anteriores gobiernos, que llegaron a subir tarifas muy por encima del IPC de referencia. Cabe recordar que la mayoría de desplazamientos que se realizan con los diferentes modos de transporte público se realizan por motivos laborales, por lo que se trata de una cuestión muy sensible para miles de personas trabajadoras o en búsqueda de empleo.
También es de agradecer la ampliación de la edad de utilización de la T-12, que a partir del próximo ejercicio podrá ser utilizada hasta los 16 años. Esta tarjeta se generó con ese objetivo, pero se fue posponiendo hasta ahora. Es una medida que significará cierto apoyo a las familias, sobre todo para las que tienen hijos en edad escolar, ya que tendrán desplazamientos bonificados durante más tiempo. Asimismo, impulsará el hábito del transporte colectivo entre los más pequeños, lo que puede contribuir al necesario cambio de modelo de transporte a medio plazo.
Otro de los puntos destacables de este acuerdo en el seno de la ATM es la creación de un título específico ante la previsión de entrar en episodios de contaminación que superen los umbrales de seguridad de la Unión Europea. La idea tiene por objetivo incentivar que los conductores de vehículos particulares puedan utilizar las redes de transporte público durante los días de alta concentración de contaminantes, con un coste unitario equivalente al de un viaje de ida y vuelta en T-10. Nuestro sindicato ha presentado propuestas similares en varias ocasiones (la última, ante la Mesa contra la Contaminación del Aire de Barcelona, este año), por lo que consideramos que se trata de una iniciativa interesante, aunque podría ser más atrevida . Aparte del potencial de atraer a conductores hacia el tren, metro, tranvía o autobús, la medida tendrá el valor de trasladar el mensaje de que estamos, efectivamente, ante una situación preocupante, y que habrá que corregirla.
Sin embargo, cabe recordar que desde CCOO de Catalunya hemos reivindicado de forma continuada que las entidades sociales (asociaciones de vecinos, organizaciones de consumidores, sindicatos, asociaciones de defensa del transporte público, operadores, etc.) debemos participar en la toma de decisiones en referencia a las tarifas del transporte público.
Una vez más se mantiene la política de convocar a las entidades para comunicarnos los precios de las tarifas una vez han sido aprobados, impidiendo la participación efectiva en el proceso. Ante esta situación, desde CCOO de Catalunya queremos reiterar la necesidad de garantizar la participación de los agentes sociales en todo el proceso para negociar las tarifas del transporte público de cada ATM (en el resto de Catalunya la situación es análoga).
Las nuevas medidas acordadas por las administraciones de la ATM implican un déficit adicional del sistema que se calcula en un 20 millones de euros, a lo que habrá que añadir el previsible incremento de los costes de explotación por la subida de los precios de los carburantes. Compartimos la necesidad de exigir una mayor implicación al Gobierno central para rectificar las políticas de recortes que han aplicado desde hace años al transporte público de Cataluña y del resto del Estado. Pero no nos parece serio que unas administraciones condicionen lo que debe hacer otra. Justamente por eso es necesario un debate en profundidad sobre el modelo de financiación de este servicio público, con todos los agentes implicados.
Se hace evidente la necesidad de poner en marcha una mesa de diálogo social sobre tarifas y financiación del transporte público, que debería incluir a todas las administraciones implicadas ya las entidades que trabajemos en la defensa de un transporte público accesible y de calidad. La implicación de las entidades sociales permite valorar mejor la contribución del transporte público a la reducción de impactos ambientales, la prevención de accidentes de tráfico, la mejora de la calidad de vida o la justicia social. Además, los compañeros y compañeras que trabajan en el transporte público son sus mejores conocedores, y pueden aportar mucho conocimiento a la hora de optimizar estos servicios.
CCOO de Catalunya reclama una política aún más decidida de fomento del uso del transporte público, con la fidelización de sus usuarios y usuarias y la garantía de acceso a las personas con mayor riesgo de exclusión. Existen demasiadas restricciones en la actualidad para estos colectivos, como es el caso de muchos ciudadanos y ciudadanas en situación de paro que no tienen derecho a ninguna bonificación social.
Oficina de Prensa de CCOO de Catalunya
Barcelona, 14 de diciembre de 2016